La polémica por la aprobación de una nueva ordenanza de supermercados, que achica las distancias que debe haber entre un negocio de esa índole y otro, no se detiene.

Luego de que, por mayoría, el Concejo Deliberante aprobara la medida, propuesta por el Ejecutivo que reduce de 600 metros a 300 metros ese límite, el edil Federico Achával presentó una propuesta para que sean los comercios ya instalados los que decidan si puede desembarcar uno nuevo o no.

Se trata de un registro de oposición, donde los propietarios o administradores de los actuales locales podrán negarse a la radicación de un nuevo establecimiento, con superficies mayores a los 100 m2, y quieran ubicarse a 600 metros.

"Lo que hizo Ducoté con esta nueva legislación es reducir los requisitos para las grandes superficies comerciales y facilitar su instalación y habilitación. Nos preocupa cómo afectará a pequeños locales como verdulerías, carnicerías o almacenes, a los que encima se les hace muy difícil sostenerse en este contexto económico", expuso Achával.

La propuesta crea el “Registro de Consulta para la Protección del Comercio Local” y señala que "todos los comercios con superficies mayores a 100 mt2, que inicien trámites de construcción o habilitación, deberán contar con la conformidad del 51% de los comerciantes inscriptos en el Registro, que se encuentren en un radio de 600 metros".

"Lo más justo es que sean los comerciantes, que hace años vienen trabajando e invirtiendo en Pilar, los que puedan participar en la definición de cada nueva apertura. Queremos acercarles una herramienta que les dé un mínimo de protección. Antes que habilitar cualquier nuevo local, lo más importante es preservar a los que ya están, que son, además, los que más empujan y aportan al crecimiento de Pilar”, agregó el legislador local.

La iniciativa, que deberá tratarse en el deliberativo, establece que previo a la radicación de un nuevo establecimiento se deberá realizar un estudio del impacto socio-económico y ambiental.

"Se está proponiendo una proliferación comercial sin tener en cuenta temas básicos como la circulación, los accesos o la infraestructura", opinó Achával.

Con la SCIPA

Achával y otros ediles de la oposición, como Silvio Rodríguez y Juan Pablo Roldán, mantuvieron una reunión con los integrantes de la comisión directiva de la Cámara de Comercio de Pilar, SCIPA, para explicarles los alcances de la idea.

"Queremos acompañar a las Cámaras de Comercio que están preocupadas por esta situación y a las que lamentablemente este gobierno no escucha. Son ellos los que la vienen peleando, los que saben más que nadie cómo está la calle, cuáles son las necesidades y qué cosas podrían ayudarlos a atravesar este momento", disparó.

“El desarrollo de esta ciudad sólo se logrará respetando a quienes forman parte de su identidad y de su historia", concluyó.

La SCIPA ya había mostrado su malestar para con la medida, aprobada el jueves pasado, incluso al señalar que se estaría beneficiando a supermercados chinos que cada vez en más número se construyen en Pilar. Pero además, también habría otros locales de la cadena CENCOSUD a los que podría serle útil la modificación de la ordenanza que impulsó el Ejecutivo, ya que tendrían intenciones de instalar nuevos locales de hasta 1799 m2 en cercanías a otros ya existentes.