Las aprehensiones se llevaron a cabo por parte de la policía en Del Viso, Fátima y Pilar, en el marco de distintos operativos.

Así lo dispuso el Juez Federal Adrián González Charvay quien consideró que los implicados “infringieron el artículo 205 del Código Penal sin causa de justificación alguna”. Los embargos sobre los bienes, en tanto, son de entre 100 mil y 300 mil pesos.

El hecho ocurrió en Presidente Derqui, cuando el malviviente amenazó a los trabajadores, los condujo a una oficina e intentó quitarles dinero. En medio de los forcejeos, la Guardia Urbana detectó la situación y pudo aprehender al ladrón.

Se realizaron en barrios de Del Viso, Lagomarsino, Manzanares, Fátima y continuarán en otros puntos del distrito. En puestos fijos y dinámicos, se controlan a conductores y peatones.

El personal será distribuido en seis grupos de entre 9 y 12 efectivos que se movilizarán por separado en distintos lugares, aunque actuarán en conjunto ante algún hecho delictivo, dijeron las fuentes.

Los apresados son un hombre de 68 años, sobre el que pesaba una orden de detención, y una mujer de 34. Fue tras un allanamiento en una vivienda de la localidad de Luis Lagomarsino. Les hallaron 52 envoltorios con cocaína, marihuana y dinero.

El malviviente ingresó al local y escapó con efectivo y otros elementos de valor. Pero fue aprehendido por la Policía mientras intentaba escapar.

Camil Marín, de 16 años, fue hallada por la policía en la zona de Matheu. Ya se rencontró con sus familiares.

Fue en un allanamiento que se concretó en una vivienda de Pilar. Las acusadas formaban parte de una peligrosa banda de asaltantes que había sido desarticulada en junio. La policía también incautó 200 mil pesos en efectivo y varias chapas de patentes.

Camil Marín tiene 16 años y había ido a la casa de una amiga, en Villa Rosa. Cerca de las 20 horas había avisado a su madre que estaba llegando a su domicilio, pero eso no sucedió. La familia teme por un exnovio que, señalan, la amenazaba.

Fue en la localidad de Manuel Alberti. Inspectores comunales advirtieron movimientos y al controlar el lugar hallaron dentro del local a unas diez personas bebiendo vino en distintas mesas.