Familiares y vecinos del niño abusado y asesinado a golpes renovaron este viernes el pedido de justicia con una nueva movilización en el centro de Pilar.
Pasadas las 17 horas, un nutrido grupo de personas, entre las que se encontraban la tías y el abuelo de la víctima Thiago Fleitas, se concentraron en la puerta de la casa de la madre del menor, Pamela Palacios, ubicada sobre la calle San Martín, del centro de Pilar.
Con pancartas y carteles reclamaron que la mujer quede tras las rejas ya que la consideran cómplice del aberrante hecho.
Sobre la puerta de la vivienda donde actualmente reside Palacios escribieron "Asesina" y "Justicia por Thiago", lugar que contó con custodia policial. Algunos de los manifestantes apedrearon la vivienda.
Tras varios minutos allí, los manifestantes caminaron por la exruta 8 hacia la Ruta 25, donde realizaron un corte.
La familia de Thiago, además, insistió con que los organismos del Estado y la Justicia no oyeron las denuncias que habían realizado con anterioridad donde advertían que el menor era maltratado.
"Queremos que renuncien todos los que dejaron desamparado a Thiago", dijo una de sus tías.
A su vez, el abuelo del niño, José Fleitas, había manifestado que él ya había radicado una denuncia ante la Justicia por maltratos contra Thiago, pero esta no actuó.
“Dije que el bebé era golpeado, hay fotos del maltrato que sufría pero nadie hizo nada. Queremos que sea detenida porque ella también es cómplice”, sostuvo en diálogo con Pilar de Todos el abuelo del menor.
Thiago murió el pasado viernes 19 de marzo luego de haberse desvanecido en su casa del barrio San Alejo, en Pilar.
Palacios, junto a su pareja Ariel Farías - actualmente detenido- lo llevaron al hospital y, según indicó el abuelo del nene, "dijeron que se había ahogado con la comida".
Los médicos intentaron reanimarlo en varias oportunidades, pero el nene finalmente falleció debido a una hemorragia interna producto de un golpe en el estómago.
Al ser atendido, los profesionales detectaron que Thiago presentaba quemaduras y signos de abuso sexual, por lo que dieron inmediata intervención a la policía.
Posteriormente, los médicos forenses del Cuerpo Médico de San Isidro realizaron la autopsia y le informaron al fiscal que la causa de muerte del niño era una “hemorragia introabdominal por desgarro traumático de mesocolón”.
Según detallaron las fuentes, esa hermorragia databa de tres días y fue producida por un fuerte golpe que el niño había recibido en el abdomen.
Pero además, los forenses descubrieron que el menor tenía signos de haber sido víctima de abuso sexual en un período de entre 7 y 45 días antes de su fallecimiento y también algunas lesiones de quemaduras de vieja data en distintas partes de su cuerpo.
A principios de esta semana tanto el padrastro de Thiago como la madre del niño declararon ante la Justicia. El hombre aseguró no tener nada que ver con lo sucedido, ya que jamás se quedaba solo con el niño.
De hecho, deslizó que los golpes que tenía el menor podrían haber sido en la casa de la abuela, donde Thiago estuvo el lunes anterior a su muerte.
En el caso de la madre, la Justicia decidió no detenerla, pero pedir pericias psicológicas sobre ella.