Una violenta entradera volvió a registrarse en Pilar, en este caso en una vivienda de Irizar.
Ocurrió en Barrio Chico, de esa localidad, en una vivienda de la calle El Rebenque, en el lote 14, cuando unos 5 ladrones, fuertemente armados y en encapuchados, sorprendieron a una familia mientras dormía.
Fue cerca de la 12:50 de la madrugada de este lunes 24, cuando los asaltantes ingresaron por una ventana, y con armas de fuego redujeron y maniataron a los dueños de casa, un matrimonio, y a sus dos hijos adolescentes. En el lugar, también estaba un pequeño bebé de la pareja.
“Los ladrones metieron las armas por una ventana, minutos después de que la familia se fue a dormir, y los obligaron a que abran. No sé sabe si los estaban esperando. Estaban encapuchados y todos armados”, contó Germán Torres, un vecino del lugar, quien pudo hablar con las víctimas tras el hecho.
“Una vez adentro los redujeron, le pedían plata permanentemente. Es una familia que hace un mes vino al barrio, porque no podían pagar alquileres, y de a poco están haciendo la casa. El hombre les dio algo de dinero, pero insistían en que querían más. Empezaron a llevarse también televisores, computadoras, una consola de juegos, y pretendieron robarse también la camioneta del dueño de casa, pero como no funcionaba, empezaron a pedir ayuda a alguien que supuestamente estaba afuera para que venga a buscarlos. Pero el barrio, por la noche, tiene un portón que instalamos hace 3 años, que es cerrado justamente para evitar que ingresan autos”, añadió Torres.
El vecino contó que los malvivientes, incluso, intentaron robar una casa contigua, siempre con el objeto de buscar dinero, pero al romper el alambrado de esa vivienda varios perros empezaron a ladrar, por lo que decidieron escapar a pie por la zona de las vías, llevándose consigo los elementos de valor robados a la familia.
“Es un barrio abierto, no cerrado, pero el portón lo pusimos para evitar que ingresen autos desconocidos y sentirnos más seguros, pero el resto del barrio, donde hay 50 lotes, tiene como perímetro alambrado de campo. La familia asaltada está aterrorizada porque los ladrones dijeron que iban a volver. Lo que necesitamos es patrullaje, que es nulo, y al menos tres cámaras de seguridad en la zona. Incluso a pocos metros de la casa asaltada apareció un auto incendiado de otro hecho”, concluyó Torres.