Esta mañana vecinos que vienen reclamando por la instalación y puesta en marcha de dos centrales termoeléctricas en el límite de Pilar y Escobar se organizaron para hacer llegar sus demandas al Presidente de la Nación, Mauricio Macri.
Todo sucedió en las inmediaciones de la autopista Panamericana, donde a la altura del Km 48,5 el primer mandatario participaba de la inauguración del centro médico Diagnóstico Maipú.
Hasta allí llegó el grupo de vecinos que con carteles y pancartas buscaron visibilizar la problemática y hacerle llegar a Macri el descontento y pedido para que APR Energy y Araucaria sean erradicadas.
Uno de los carteles fue desplegado a la vera de la Panamericana, mientras el Presidente se dirigía a los presentes. Mientras que otros fueron colocados en el puente que une ambas manos de circulación.
Los movimientos de los vecinos generó también el desplazamiento de agentes de Gendarmería que frenaron el avance de los vecinos hasta casi una cuadra de distancia de donde se desarrollaba el acto.
“Vinimos a decirle al Presidente Macri No a las Termoeléctricas. Pudimos manifestarnos pacíficamente y logramos que el Presidente nos viera. Seguiremos nuestra lucha, porque los pueblos unidos de Matheu y Villa Rosa le seguimos diciendo no a las industrias de categoría 3 en zonas residenciales”, manifestó Erica Hahn, al frente de la Organización de Ambientalistas Autoconvocados.
En las últimas semanas, vecinos de la zona donde se instalaron las plantas generadoras se habían mostrado molestos luego de que el intendente Nicolás Ducoté manifestara que las quejas por esas industrias provenían de barrios cerrados, y ligando esa preocupación a un interés inmobiliario.
Rápidamente, los habitantes volvieron a recalcar que la principal preocupación es ambiental.
Además, los vecinos se mantienen en alerta luego de una serie de episodios de fuertes ruidos provenientes de las turbinas de las termoeléctricas, acción que se enmarca en una serie de pruebas que las empresas están realizando.
Mientras tanto, persiste la insistencia para que las plantas, que aún no están habilitadas pero están haciendo pruebas, deben ser trasladadas a zonas industriales, ya que fueron erigidas en áreas cercanas a residenciales, mediante un cambio de zonificación aprobado por el Concejo Deliberante el año pasado, y avalado por la gobernadora María Eugenia Vidal.