La Asociación Patrimonio Natural de Pilar explica qué hay que hacer para que el jardín de nuestras casas se llenen de mariposas en esta primavera.
En primer lugar, explicaron que «aunque no lo parezcan, árboles tan tradicionales en las veredas argentinas como los paraísos, fresno, arce, roble y plátanos son especies exóticas».
En ese sentido «su inclusión forzada en el ecosistema amenaza la flora y la biodiversidad local». Por eso, para atraer las mariposas no hay nada mejor que plantar especies nativas.
Con esa acción «el jardín se va a llenar de picaflores y mariposas», expresaron desde la institución pilarense que tiene a su cargo el predio de la Reserva Natural.
«Las plantas nativas son las que evolucionaron, propagaron y se desarrollaron espontáneamente en una zona, área o región sin la intervención del hombre. Cuando los días se ponen lindos, decidimos que nuestros jardines necesitan colores y belleza. Uno va al vivero, compra paraísos, ligustrinas y pinos, campanillas, crisantemos, madreselvas, alegrías del hogar y variadas semillas. Espera por un día bien soleado, agarra los guantes, la pala, la regadera y la carretilla, las plantas y se siente muy ecologista. Pero cuidado: con ese gesto tal vez se esté desplazando y comprometiendo el crecimiento de especies nativas, mientras estamos alejando de la zona orugas, artrópodos, picaflores, mariposa, aves y otros seres lugareños. Nada ecologista», explicaron.
La gran parte de nuestros espacios verdes están poblados por especies exóticas, de lugares como Norte América, Europa y Asia, que fueron traídas a nuestro país por la inmigración. Muchas de ellas levantan las baldosas o se quiebran con vientos fuertes, simplemente porque son de otros climas de otras regiones.
Además, las especies exóticas no tienen gran interacción con la fauna local porque no se alimentan de ellas o no les sirve como nidos o refugios. A la vez, estas especies no tienen los controladores o depredadores naturales de sus regiones por lo que pueden transformarse en plaga, provocando todo un desequilibrio que se convierte en toda una amenaza para nuestra flora y fauna local.
«Esto actualmente sucede (como en otras áreas) en la Reserva Natural del Pilar, las especies exóticas como el Acacio Negro, que fueron introducidas a principio de siglo XX, invadieron el área protegida alterando la naturaleza y desplazando las especies nativas», agregaron.
Existen diversos factores como el cambio climático, el cambio de uso de suelo, la contaminación, las consecuencias del fenómeno de la Niña, forestación con especies exóticas y el acelerado crecimiento de las zonas urbanas, que han impactado negativamente en la conservación de ecosistemas provocando una gran pérdida de biodiversidad.
Derivado de estas alteraciones en el ambiente, en la Reserva Natural del Pilar se han generado la necesidad de desarrollar trabajos de investigación que estén enfocados en el estudio de la diversidad, distribución y conservación de plantas nativas para utilizarlas en proyectos de restauración de zonas afectadas y en la creación de nuevos espacios junto con otras organizaciones.
Ya no alcanza con mitigar, es necesario restaurar.
«Con el gran trabajo de todos los voluntarios y cuerpo de guardaparques que integran la Reserva y la ONG Patrimonio natural estamos controlando el crecimiento y la expansión de especies exóticas invasoras a través de la técnica de anillado y reforestación con especies nativas. Las plantas originarias ofrecen refugio y alimento para aves, colibrís, insectos y mariposas propios de esos lugares. El Tala (Celtis tala) le brinda refugio y hogar a mamíferos y aves, y alimento a las orugas de la mariposa como Zafiro del talar (Doxocopa seraphina Hübne). Mientras que las hojas de la pasionaria o mburucuyá (Passiflora edulis) son el único alimento para la oruga de la mariposa, conocida como Espejitos», informaron.
En Patrimonio Natural se cuenta con un vivero de plantas nativas en donde se pueden encontrar especies como Espinillo, Anacahuita, Ombú, Tala, Sen del campo, Tasi, Ceibo, Timbo, Sauco, entre otras. «Nuestra tarea es difundirlas y que la gente reconozca su belleza y los beneficios de cultivarlas», indicaron.
Siempre suponemos que otro arreglará los problemas. Sin embargo, en este tema no es sólo cuestión de exigir cambios, sino también de incorporarlos y hacerlos propios.
De esta forma, deberíamos comprender que una de las necesidades más humanas, “plantar un árbol”, necesita reformularse por “plantar un árbol nativo”.
En la página de Patrimonio Natural podes descargar de manera libre y gratuita las guías de plantas, flores y mariposas de la Reserva Natural de Pilar.