Desde la UOCRA de Pilar mostraron su fuerte preocupación por la constante pérdida de fuentes laborales en el sector, debido al parate en la construcción privada y en la obra pública.
Según advirtió el titular de la central obrera de Pilar, Sebastián Di Fiori, desde abril, cuando comenzó la escalada del dólar, hasta los primeros días de septiembre se perdieron en el distrito al menos 2.500 puestos de trabajo, y la tendencia parece no frenarse.
"Con la suba del dólar, y la distorsión de los precios, el sector privado frenó varias obras. Y a eso se le suma el ámbito público, que también paralizó casi todo", alertó Di Fiori a Pilar de Todos.
En ese contexto, el titular de la UOCRA local expuso que el escenario que se vislumbra en el futuro cercano es poco alentador.
"No estamos viendo que esto mejore, sino un panorama cada vez peor. La gente y las constructoras privadas no están haciendo casi nada, y el Estado tampoco. Además, las tres grandes obras que teníamos en Pilar para lo que resta del año y el que viene, como la extensión de las redes de AySA, la ampliación de sectores de las termoeléctricas, y la segunda etapa de la repavimentación de la exruta 8, (entre el KM 50 y el ingreso al centro), aún no fueron confirmadas, no sabemos si se van a concretar", agregó Di Fiori, quien también mencionó que no hay precisiones respecto a otra obra importante, la electrificación del ferrocarril San Martín.
"Cada vez son más los compañeros sin trabajo, y no le estamos pudiendo resolver la situación, que es lo que nos preocupa como gremio", concluyó.
Desde el Municipio, el Jefe de Gabinete de Pilar, Juan Pablo Martignone, había señalado a Pilar de Todos que no había información respecto a qué sucederá con obras claves, justamente como las de AySA o la exruta 8, al tiempo que añadió que no había previsión de labores nuevas, en el marco del fuerte recorte que está encarando el gobierno nacional para achicar el déficit fiscal.
En el plano privado, además, Martignone informó que la Tasa de Derechos de Construcción, justamente la que sirve de termómetro para ver cómo marcha la actividad, recaudó un 30% menos de lo calculado en el primer semestre del año.
