Tras los reclamos de la Cámara de Comercio de Pilar (SCIPA) el Municipio salió a mostrar inspecciones en contra de la venta callejera.
Desde SCIPA habían señalado que los controles, si bien esporádicos, no alcanzaban para luchar contra el comercio ilegal, e incluso señalaron que el año pasado “llamativamente” los vendedores eran alertados presuntamente por alguien de la Comuna cada vez que ellos hacían una denuncia.
Es más: desde la SCIPA habían asegurado que si bien veían buena predisposición del área de Seguridad de la Comuna, no se reflejaba en ese mismo sentido en la de Inspectores.
Desde la Comuna, no obstante, habían manifestado que los controles se hacían no solo en el centro, sino también en las localidades, al tiempo de aclarar que se persigue a “organizaciones” que se dedican a la venta ambulante con productos de dudosa procedencia, y no a aquella persona que por necesidad necesita salir a vender para subsistir.
Ahora, el Cuerpo Único de Inspectores y la Guardia Urbana de Pilar realizaron una serie de operativos, pero no solo en Pilar centro, sino Del Viso y Villa Rosa.
En los mismos se secuestraron ropas, alimentos, bijouterie y productos de limpieza.
"Venimos realizando operativos para atacar la venta ilegal organizada en conjunto con la Secretaría de Seguridad. El objetivo es combatir la venta ilegal que realizan organizaciones que venden distintos tipos de productos, a los efectos de evitar un perjuicio a aquellos comerciantes que con mucho esfuerzo pagan alquiler, sueldos y demás para estar en regla”, señaló Jorge Storni, vicejefe de Asesores y a cargo del área de Inspecciones, quien insistió en que las denuncias, esas que SCIPA asegura eran “filtradas” por alguien de la Comuna hacia los vendedores”, deben hacerse a la línea 147.
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