Comerciantes del centro de Pilar mantuvieron una reunión con autoridades del Municipio en la que volvieron a expresar preocupación por la presencia de la venta ambulante en el casco histórico, lo que, señalan, «genera competencia desleal».
Luego de haber difundido un nuevo índice de ventas correspondiente al mes de noviembre donde se registró una fuerte caída en las unidades comercializadas (-10,34%), la SCIPA pidió un encuentro con la Secretaría de Desarrollo Económico para evaluar medidas que fomenten el consumo en el centro.
Participaron del encuentro, los miembros de la Comisión directiva de la entidad y la titular del área comunal, Claudia Juanes.
Allí, los comerciantes pidieron controles con respecto a la venta ambulante. Manifestaron que la misma «no favorece al comercio local ni a la seguridad de la ciudad» ya que, señalaron, se detecta la presencia de «vendedores ambulantes que no son del partido».
Según SCIPA, los vendedores « solo se dedican a intimidar y generar disturbios derivando dicho control a la secretaria de seguridad a la cual correspondería».
Durante el encuentro, los comerciantes también pusieron el ojo en las carpas de artesanos que se instalan en la Plaza 12 de octubre durante los fines de semana.
Expresaron que «principalmente en fechas importantes aumentan la cantidad de carpas» y «se incluyen productos de reventa cayendo en una competencia desleal con el comercio instalado».
Frente a ello, desde la Secretaría tomaron el compromiso para llevar adelante los controles necesarios para que esto no ocurra, informaron desde SCIPA.