El Municipio calcula que subsidiar al transporte público automotor el año que viene le significaría a la Comuna una erogación extra de entre 80 y 100 millones de pesos.

Es que si bien la Provincia de Buenos Aires absorberá los montos que a su vez pagaba la Nación, unos 25 mil millones de pesos para todo el territorio bonaerense, lo hará a valor de este 2018, por lo que cualquier variación en las tarifas o el gasoil en 2019 impactará en las cuentas locales.

Esa es la previsión que por estas horas hacen desde el gobierno del intendente Nicolás Ducoté, en el marco del análisis del presupuesto bonaerense y cómo este repercute en las arcas de Pilar.

Es que la legislatura realizó una serie de recortes y derivó en las Comunas varias responsabilidades que eran de injerencia bonaerense o de Nación, con el objetivo de achicar el gasto. Una de ellas el transporte.

“El impacto es bajo, mucho menor al pensado. En un principio se hablaba de tener que hacernos cargo de todo el esquema de subsidios de las líneas de colectivos (por las líneas 500), un monto de unos 400 millones de pesos. Pero la Provincia sostendrá los subsidios, aunque a valores de 2018. En el peor de los escenarios, con una inflación del 25% para el año que viene, calculamos que deberíamos estar hablando de unos 80 millones o 100 millones de pesos anuales como máximo, aunque aún restan definir cómo se compone esa erogación extra, ya que inciden las subas de tarifas, el gasoil, y los boletos con atributos sociales”, explicó a Pilar de Todos el Jefe de Gabinete de la Comuna, Juan Pablo Martignone.

“Ese es uno de los puntos que más incógnita nos genera aún, pero no debería significar más de 80 o 100 millones, siempre pensando en el peor de los escenarios”, agregó el funcionario, quien ya había manifestado que la intención era la de mantener los subsidios y evitar así que se dispare el valor del boleto, aunque resta saber si Provincia va a pasar a tarifa parte de lo que por el momento está subsidiado.

Fondo Sojero y tarifa social de luz

Otros de los aspectos que se siguen analizando tienen que ver con la quita del Fondo Sojero, la tarifa social de la luz, y el Fondo Educativo.

En lo que es el Fondo Sojero, que a Pilar le habrían significado unos 40 millones de pesos para 2019, Martignone explicó que la Provincia financiará obras en ese orden de dineros, por lo que se está trabajando en proyectos de infraestructura vial.

En cuanto a la tarifa social de la luz, también la Provincia se hará cargo de sostenerla, aunque el Municipio debería afrontar el gasto de algunos medidores comunitarios que se han instalado en algunos barrios.

Otra de las preocupaciones tenía que ver con el destino del Fondo Educativo. En principio, la idea de la Provincia era que las Comunas destinen el 100% de ese dinero a obras de infraestructura escolar, lo que en Pilar, de llevarse a la práctica, obligaba a tener que cerrar la mayoría de las escuelas municipales, ya que con parte de esos fondos se pagan sueldos de los profesores y alquileres, entre otros gastos administrativos.

No obstante, se incluyó que el Fondo Educativo sea destinado también a “Servicios Escolares”, lo que engloba a las escuelas municipales, mientras que el rango de gastos en obras seguirá en un 50%.

“El hecho de que se haya añadido ‘Servicios Escolares’ nos permite incluir a las escuelas municipales. Pero además recibiremos más dinero del previsto por este fondo, por lo que podremos hacer las obras de mantenimiento que teníamos planificadas, sobre todo en lo relacionado con instalaciones  de gas y electricidad”, agregó el funcionario.

Otro de los aspectos a revisar tiene que ver con la modificación de la Ley Orgánica de las Municipalidades (LOM) que redujo de un 3% a un 2% como máximo el dinero que se puede destinar al Concejo Deliberante.

Martignone explicó que el legislativo, para ajustarse a esos números, deberá posponer un proyecto de compra de un edificio propio (funciona en uno alquilado), y aclaró que no deberá desprenderse de personal, como había trascendido semanas atrás.