Luego de que el Juzgado de Garantías N° 6 de San Isidro ordenara nuevas detenciones en la causa por el incendio y muerte de cuatro internos en el centro de rehabilitación “Resiliencia San Fernando”, se reaviva en pedido para que el Estado profundice los controles en esas instituciones.
En febrero pasado, en el lugar murieron calcinadas cuatro personas que estaban sometidas a aislamiento extremo, castigos, sobremedicación y un abordaje tratamental que no respetaba la ley de salud mental. Todo dentro de una institución, ubicada en La Lonja, que no se encontraba habilitada.
En ese marco, el periodista e investigador Pablo Galfré, reclamó que el Estado debe realizar los controles en las instituciones de salud mental y sobre todo, erradicar las granjas clandestinas.
En una entrevista que concedió al programa radial Agenda Propia de FM Estudio 2 (105.9), Galfré sostuvo que “el Estado tiene que implementar un equipo que se dedique, especialmente, a investigar muertes dudosas en instituciones de salud mental y que esté capacitado para investigar a las clandestinas”.
En su análisis, el periodista - que viene investigando las muertes ocurridas en las comunidades terapéuticas; la mayoría ubicadas en el partido de Pilar – expresó que se trata de lugares “donde se vulneran los derechos de los usuarios del sistema de salud mental” y agregó que, lamentablemente “tuvo que pasar un incendio y cuatro muertos, calcinados, encerrados en habitaciones, para que el Estado intervenga”.
Además, criticó el accionar del Órgano de Revisión de la Ley de Salud Mental de la Provincia de Bs. As. Al que acusó de “no hacer absolutamente nada por velar por la seguridad de los usuarios”.
La figura de Alejandro Merenson
Uno de los detenidos por el incendio en Resiliencia San Fernando es Alejando Merenson, que, según la mirada de Galfré “es un personaje muy conocido en el submundo de las granjas de rehabilitación”.
El escritor lo señala como quien se encargaba de internar a las personas en las diferentes granjas: San Camilo, San Ignacio, Viaje de Vuelta, San Antonio entre otras.
“Y estafaba a las familias por cobrar por algo que no hacía falta cobrar. Las familias podían ir directamente a esas comunidades. Merenson consideraba que el adicto es un bicho, que hay que pegarle, que hay que encerrarlo”, describió Galfré, modalidad que se repitió dentro de las instituciones mencionadas.
Hasta que, en la investigación que llevó adelante el periodista, aparecieron las primeras muertes. “Primero, la de Matías Lamorte y después la de Franco Ruiz Díaz”, enumeró Galfré, a la que se sumó otra de un joven oriundo de Avellaneda ocurrida el año pasado.
“Su detención va a generar que quienes tienen estas granjas clandestinas empiecen a preocuparse, aunque si no hay una acción del Estado, solo será por un momento”, consideró Galfré.
Junto a Merenson, también quedaron detenidos la vicedirectora de Resiliencia, Eliana Wadrick; la funcionaria administrativa Alejandra Machado; el psiquiatra Fabián Samsolo y la psicóloga Alejandra General.
Todos acusados por homicidio, asociación ilícita, estafa y reducción a la servidumbre. Además, en marzo pasado, ya había sido detenido el director del lugar, Alan Cambra Sarife.
