La Cámara de Comercio de Pilar (SCIPA) pidió más tiempo para analizar el proyecto del nuevo Código de Ordenamiento Territorial del distrito.
Se trata de un proyecto que elaboró el Ejecutivo junto con un grupo de especialistas y la provincia de Buenos Aires durante 18 meses, que días atrás fue sometido a una Asamblea Pública.
Desde la SCIPA expusieron que solo tuvieron 48 horas para estudiar la iniciativa, que en términos generales rediseña el plan urbano, de planeamiento y territorial del distrito, al modificar varios indicadores urbanísticos y de uso de suelo.
“Consideramos que las normativas expresadas en la Asamblea no pudieron analizarse en detalle, ya que tuvimos acceso solo 48 horas previas. Semejante desarrollo que, según palabras expresadas por quienes ocuparon el palco y que ellos mismos reconocieron no ser de Pilar, les ha llevado un plazo de 18 meses para su presentación, no creemos lógico que se le pida al ciudadano analizarlo en dos días”, señalaron desde la entidad presidida por Cristian Hait.
“Esperamos (…) que esta iniciativa no continúe ningún camino de aprobación hasta tanto podamos, las entidades, profesionales, desarrolladores, comerciantes, industriales y los vecinos en general, dar una opinión real con los fundamentos que como siempre deben estar”, cerraron.
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El proyecto del Código de Ordenamiento Urbano y Territorial modifica una serie de parámetros e indicadores que, aseguraron desde el gobierno, buscan terminar con la “no previsión de infraestructura que acompañe a las inversiones privadas, proximidad entre las zonas industriales y las zonas urbanas, ausencia de reserva de usos para sectores de alto valor y escasa disponibilidad, reducción de las zonas residenciales urbanas y la arbitrariedad al momento de beneficiar con indicadores a parcelas individuales”.
"El nuevo COT buscará, entre otros objetivos, finalizar con las arbitrariedades en donde parcelas de similares características y usos tenían diferentes zonificaciones, establecer corredores que permitan un crecimiento equilibrado del distrito, facilitar el acceso justo y a valores razonables a la tierra, preservar el ambiente y no exponer a los sectores urbanos a prácticas industriales, fortalecer los sectores de comercio, profesional y oficinas, y restringir las zonas donde se radican aquellos sectores que generan impactos ambientales negativos", agregaron.
El texto fue puesto en duda por sectores de la oposición y algunos desarrolladores, aunque desde el Municipio insistieron en que el objeto es resolver la falta de planificación urbana que sufrió durante décadas Pilar.
De hecho, el intendente Federico Achával enfatizó en que el proyecto "resuelve la falta de planeamiento" que hay en Pilar, al tiempo que cuestionó la normativa vigente.
“Históricamente hemos escuchado siempre un crecimiento de Pilar sin planificar, y cuando se modificó el Código de Planeamiento Urbano en la gestión anterior (por la de Cambiemos) se priorizaron negocios individuales que se veían expresados claramente en oportunidades para unos pocos, dejando de lado a un montón de vecinos de Pilar”, expresó el jefe comunal días atrás.
