La otitis externa es una de las dos otitis más frecuentes en la edad pediátrica y se manifiesta principalmente durante la época de piletas, dado que los niños pasan mucho tiempo sumergidos en el agua.
 

La Dra. Cecilia García, Coordinadora de Demanda Espontánea del Hospital Universitario Austral, explicó que para reconocerla y acudir al médico los síntomas más comunes son “un dolor espontáneo o al rozar el pabellón auricular con la ropa o al tocárselo”.

“Además, empeora al masticar o al hacer presión como para tapar el oído e incluso puede salir una secreción líquida de color claro que se torna espesa y amarillenta como el pus”, señala la Dra. García.
 

Si bien son pocos, existen casos severos de otitis. Por eso, es fundamental acudir al médico para el diagnóstico y posterior tratamiento.

La doctora aseguró que es fundamental que, durante ese período, no le ingrese agua en los oídos al paciente.
 

La otitis puede prevenirse, el objetivo es evitar la humedad en el oído.

“Se pueden secar las orejas con una toalla e inclinar la cabeza de lado para que el excedente de agua salga”, detalló la Dra. García.

Y agregó: “La cera de los oídos ayuda a prevenir las infecciones, por lo que no se recomienda el uso de hisopos”.