El SARS-CoV-2, virus causante de la pandemia de Covid-19, nunca se fue ni dejó de circular y, tal su naturaleza, sigue mutando y modificándose, sin perder su estructura básica.
Según publicó en el último Boletín Epidemiológico el ministerio de Salud de la Nación, ya se detectaron en el país los primeros casos de la nueva versión del SARS-CoV-2, XFG, también conocida como “Frankenstein”, por combinar dos variantes de Omicrón.
En tanto, por fortuna, según determinaron especialistas de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), en cuanto al contagio y a los síntomas que genera, “Frankenstein” es muy similar a las otras presentaciones del coronavirus causante de la Covid-19.
De todos modos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el riesgo para la salud pública de esta nueva forma del SARS-CoV-2 se considera bajo. Aunque algunos países del sudeste asiático reportaron aumentos en los casos y hospitalizaciones, no hay señales de que esta variante cause una enfermedad más grave que otras.
Vacunación y refuerzos
Claro está que la enfermedad, tras la pandemia, no fue erradicada, sino que se cursa, como otras infecciones respiratorias, con menor intensidad gracias a que gran parte la población está vacunada o atravesó la infección, por lo que está protegida.
De todas maneras, la vacuna contra la Covid-19 requiere de la aplicación de refuerzos para que los anticuerpos – defensas – no pierdan potencia ni efectividad para enfrentar al virus. La población se divide en grupos de riesgo, que deberían estar atentos al impacto que puede tener el virus en caso de adquirirlo.
Riesgo alto de COVID-19 grave: personas de 50 años o mayores, embarazadas y personas con inmunocompromiso a partir de los 6 meses de vida. Se aplicará una dosis de refuerzo a los seis (6) meses desde la última dosis aplicada y luego continuará con la misma periodicidad (cada 6 meses).
Riesgo intermedio de COVID-19 grave o alta exposición laboral a SARS-CoV-2: personas menores de 50 años con comorbilidades no inmunosupresoras (enfermedades crónicas, obesidad), personal de salud y personal estratégico. Dosis de refuerzo a los 6 meses desde la última dosis aplicada y luego continuar con una periodicidad anual.
Riesgo bajo de COVID-19 grave: personas entre 6 meses y 49 años inclusive, sin comorbilidades. Dosis de refuerzo a los doce (12) meses de la última dosis aplicada y luego continuar con periodicidad anual.
La vacuna se encuentra disponible en los vacunatorios, centros de salud y hospitales públicos de todo el país. Además, se puede aplicar junto con las vacunas del Calendario Nacional, cono la antigripal. (DIB)