Otra vez se registran pedradas en la Panamericana, y esta vez el blanco fue una unidad del colectivo 57 que esta tarde circulaba repleto de pasajeros.
El hecho se registró pasadas las 15 horas en el Ramal Pilar mano a provincia en la bifurcación con Ruta 9.
Testigos que viajaban a bordo del colectivo contaron a Pilar de Todos que sintieron un fuerte impacto en la puerta trasera de la unidad lo que provocó que los vidrios se astillaran.
“Sentimos un fuerte golpe, miré para la puerta trasera y estaban todos los vidrios astillados, el chofer no paró por seguridad. Pero si el impacto hubiese sido dos centímetros hacia atrás hubiera terminado en la cabeza de una nena que viajaba con su papá”; se indignó Martina Montero, una de las pasajeras.
A esa hora, continuó la mujer, “el colectivo estaba lleno” y agregó que “no es la primera vez que pasa un caso así en un 57”.
“Llamé a Autopistas del Sol para solicitar que revisaran las cámaras de seguridad de la zona”, completó Montero quien además informó que afortunadamente nadie resultó herido.
En las últimas semanas, se vienen registrando casos de pedradas contra autos particulares y en horas de la noche. Pero ahora, los casos comienzan a darse también a plena luz del día.