Un expresidiario que hace un mes y medio estaba prófugo y señalado como uno de los presuntos autores del crimen de un hombre que apareció atado y ejecutado a balazos en el arroyo Pinazo, fue detenido en el centro de la localidad bonaerense de Moreno.
La detención la efectuó un grupo de transeúntes que casi lo lincha por haber atropellado a un motociclista cuando quiso escapar de un choque que había tenido con otro auto, informaron hoy fuentes judiciales y policiales.
Se trata de Diego Armando Barros (41), quien estaba siendo buscado y ahora quedó detenido por el homicidio de Ariel Robles (41), ocurrido el 3 de mayo en la localidad de Lagomarsimo, en Pilar.
Barros fue detenido minutos antes de las 16 del miércoles pasado, tras un incidente de tránsito en el cruce de Libertador y Mitre, en el centro de Moreno.
Según las fuentes, todo se inició cuando un Volkswagen Polo gris chocó contra un Chery Tiggo y, en vez de detenerse para pasar los datos, quiso huir del lugar.
La secuencia quedó grabada por las cámaras de un domo montado en la esquina, donde puede verse que el Polo se subió al cordón de la vereda, eludió a una grúa de tránsito y cruzó en rojo el semáforo, momento en el que casi es embestido por un colectivo y en el que impactó a una moto que circulaba con luz verde y cuyo conductor voló por el aire y quedó tendido en el asfalto.
Los dos ocupantes del Polo, que quedó subido a una esquina, intentaron escapar, pero los peatones y ocasionales testigos del hecho, los persiguieron, golpearon, redujeron y entregaron a la policía.
El motociclista herido tiene 53 años y fue trasladado con politraumatismos al hospital de la zona, aunque fuera de peligro.
Si bien en un principio habían dado identidades falsas, en la comisaría se pudo constatar que los dos ocupantes del auto Polo eran fugitivos en causas graves.
Según las fuentes, incluso, en los calabozos se negaban a ser requisados, a entregar sus pertenencias y se tornaron agresivos con el personal de la comisaría 1ra. de Moreno, a quienes le dijeron: “Nosotros somos presos viejos, ningún vigilante gil nos va a tocar ni revisar”.
Por un lado, el conductor fue identificado como el ya mencionado Barros, quien tiene varios antecedentes y surgió su captura en la causa por el homicidio de Pilar.
El segundo detenido es Diego Ricardo Taboas Maciel (41) quien, de acuerdo a lo que surgió de sus antecedentes, estaba con tres pedidos de captura vigentes, dos de la justicia de San Martín en causas por "robo calificado", y la tercera de la justicia platense porque, estando preso por robo, en diciembre de 2016 se fugó del Hospital Interzonal General de Agudos General San Martín de La Plata.
Además, por los choques y los incidentes posteriores en Moreno, los dos apresados quedaron imputados en una nueva causa por "lesiones graves culposas y atentando y resistencia a la autoridad", que tramita en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 de ese departamento judicial.
Fuentes judiciales indicaron a Télam que esta mañana Barros se negó a declarar al ser indagado por el fiscal Andrés Quintana, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Pilar, quien lo dejó detenido por "robo agravado y homicidio criminis causa".
El homicidio del que lo acusa ocurrió el 3 de mayo pasado cuando Robles, la víctima, le dijo a su esposa que lo acompañara a la casa de un conocido suyo en la calle Rumania al 2.900 de la localidad de Lagomarsino.
Allí, Robles fue capturado, atado y sometido a una paliza, y los delincuentes le pidieron a la esposa de la víctima que les entregara un dinero a cambio de su liberación.
La mujer fue hasta su casa junto a uno de los captores, le dio 30.000 pesos y algunos electrodomésticos, y le prometieron que Robles iba a ser liberado para la medianoche.
Sin embargo, pasadas las horas y al no recibir noticias de su esposo, la mujer fue al destacamento de Lagomarsino para denunciar lo ocurrido.
El cadáver de Robles fue hallado al día siguiente con una soga alrededor del cuerpo en el arroyo Pinazo a la altura de José C. Paz y la autopsia determinó que había sido asesinado de disparos en la cabeza.
Barros es el segundo imputado que quedará preso por el caso, ya que de los tres primeros detenidos que hubo por este crimen, solo un hombre identificado como Oscar Ledezma quedó procesado con prisión preventiva, y dos mujeres ya fueron liberadas.